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Caputo endurece su postura y cuestiona el endeudamiento aprobado para Buenos Aires
Economía Política Provincia

Caputo endurece su postura y cuestiona el endeudamiento aprobado para Buenos Aires

Dic 5, 2025

El ministro de Economía Luis Caputo volvió a tensar la relación con la provincia de Buenos Aires al cuestionar el endeudamiento aprobado por la Legislatura y advertir que el distrito “no cumple la Ley de Responsabilidad Fiscal”, poniendo en duda los avales nacionales para la toma de nueva deuda y reabriendo la disputa con el gobernador Axel Kicillof.

Caputo señaló que Buenos Aires registra un crecimiento de gasto corriente por encima de la inflación, lo que —según dijo— impide autorizar operaciones que no sean estrictamente rollover. Sus declaraciones coincidieron con las críticas del diputado Sebastián Pareja, quien sostuvo que el presidente Javier Milei “no convalidará bajo ningún concepto” el esquema financiero solicitado por la gestión de Axel Kicillof.

En el gobierno bonaerense describen la postura nacional como una maniobra política. Kicillof acusó a la administración Milei de “apostar al colapso provincial” y defendió el acuerdo aprobado con votos del oficialismo y sectores de la oposición. Desde La Plata remarcan que la mayor parte del monto autorizado se destina a cubrir vencimientos heredados, especialmente bonos emitidos durante la gestión de María Eugenia Vidal, y a recomponer fondos utilizados este año ante la falta de Presupuesto nacional.

El paquete votado incluye USD 1.990 millones para obligaciones de 2026 y USD 1.045 millones para amortizaciones de 2025, además de financiamiento para obras de energía, infraestructura y un fondo municipal equivalente al 8% del total. Funcionarios provinciales señalan que otras jurisdicciones —como Ciudad de Buenos Aires y Santa Fe— colocaron deuda recientemente sin objeciones del Ejecutivo nacional.

La advertencia de Caputo deja abierto un nuevo capítulo en el vínculo entre Nación y Provincia, en un contexto donde el cumplimiento de las metas fiscales y la disponibilidad de financiamiento externo vuelven a ser el centro de la disputa política.